¿Cuándo comenzamos el día, somos los mismo que ayer?
Iniciamos nuestro trabajo, nuestra tarea es VENDER. ¿comenzamos todos los días iguales?
¿Y qué tal si nos tomamos un día solo para analizar nuestra actividad, nuestro entorno, los clientes, los productos, las problemáticas que se nos presentan, como han cambiado los hábitos de la gente, su presupuesto, sus prioridades, y si nos contagiamos del desánimo de nuestros colegas?, etc.
Además, en épocas de bonanza cometemos el error de ser prejuiciosos, de subestimar a los clientes (ej. “este nunca nos comprará” “este cliente es insoportable, no quiero atenderlo” “pierdo tiempo y nunca se decide” “no me cae bien” etc. etc. etc.)
¡Despojémonos de nuestros prejuicios!
Tiene que nacer un NUEVO VENDEDOR despojado de vicios, que aprenda o use un estilo diferente para un mundo diferente y si o si debe cambiar su método de control de ventas, sus mediciones, sus conocimientos y hasta quizás pedir a la empresa importantes cambios, de estilo y estructurales. En las empresas TODOS VENDEN y son el apoyo del vendedor.
¡EL ÉXITO está en nosotros!
En este taller le proponemos hacer esta tarea juntos.
|