La soledad de sus puestos los debilitan, los colocan muchas veces en un callejón sin salida. Corren, corren y corren, apagando incendios por todos lados. Deben dar respuesta a todos: a sus colaboradores, gerentes, proveedores y a otras áreas. Y a ellos ¿Quién les da respuesta?
Les sobran exigencias y les faltan recursos. Pero sobre todo se enfrentan a un equipo de trabajo desmotivado, que son quienes deben realizar la tarea. Y esto repercuten en los clientes que esperan eficiencia y calidad sin importarles cuanto les cuesta a ustedes.
El Líder: Jefe o Supervisor necesita estar apoyado con capacitaciones que le faciliten la tarea diaria. NO esperar a que la bomba explote y pierdan a su gente.
Las empresas deben abrir los ojos, analizar esta problemática y darles el mayor apoyo. No son momentos para perder personal.
En este taller les brindaremos nuevas herramientas de inteligencia emocional, de comunicación, organización, manejo del estrés y cómo trabajar para que nuestro equipo sea parte de nuestras soluciones diaria.
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